Zenyazen Escobar: El falso redentor de la educación en Veracruz que se enriqueció como Duarte y ahora sueña con la gubernatura
Blindado, con residencias de lujo y con un pasado plagado de corrupción, el exsecretario de Educación y actual diputado federal presume en redes que “no es igual” a Javier Duarte… pero los hechos lo contradicen brutalmente.
Xalapa, Ver., 18 de julio de 2025.
La osadía política alcanzó nuevos niveles este viernes cuando el diputado federal y exsecretario de Educación, Zenyazen Escobar García, publicó en sus redes sociales una infografía donde se atreve a compararse con el exgobernador preso, Javier Duarte de Ochoa, proclamando: “Hay diferencias abismales: con la 4T en Veracruz, progreso, bienestar y atención prioritaria a la educación; con Duarte, atraso, saqueo y corrupción. No somos iguales”.
Sin embargo, esa afirmación fue inmediatamente desmentida, no por la prensa ni por sus adversarios, sino por los propios ciudadanos, maestros y víctimas de su paso por la Secretaría de Educación de Veracruz (SEV), quienes inundaron sus publicaciones con reclamos, burlas y verdades incómodas.
Una maestra, visiblemente indignada, escribió:
“¿Es real esta publicación??? ¡Vergüenza es lo que no tienen los de la 4T! Han hecho de la educación un cochinero para seguir manteniéndose en el poder. Hoy el magisterio paga el precio de su mal manejo, su administración y su ineptitud para liderar esos puestos que demandan inteligencia”.
Y es que Zenyazen Escobar García, conocido por su pasado humilde como asistente administrativo del Telebachillerato de Córdoba, pasó de no tener ni para los pasajes a convertirse en un funcionario millonario durante su paso por el Congreso local y luego como titular de la SEV. Hoy, se mueve en camionetas blindadas, rodeado de escoltas armados y presume propiedades en Xalapa, Boca del Río y Córdoba, así como paseos a caballo en sus tiempos de descanso.
Durante su gestión en la SEV, Veracruz registró los peores indicadores educativos del sexenio, con miles de alumnos sin clases por falta de maestros y una escandalosa desviación de recursos a través del Instituto de Espacios Educativos, que también está bajo la lupa por la millonaria y fallida rehabilitación del Estadio Luis “Pirata” Fuente, que hoy presenta fallas estructurales graves.
Pero Zenyazen no solo falló como funcionario: construyó un aparato político paralelo con miles de maestros obligados a respaldarlo a él y a Morena, usándolos como peones electorales mientras las aulas quedaban vacías y la educación colapsaba.
Su repentina riqueza, sus gustos ostentosos, su cinismo para negar lo evidente y su descarada ambición por la gubernatura no solo lo igualan a Duarte, sino que lo rebasan en arrogancia. La única diferencia —como bien lo saben los veracruzanos— es que Duarte ya fue juzgado y sentenciado… Zenyazen aún no.
¿Hasta cuándo el pueblo de Veracruz permitirá que la historia se repita con nuevos rostros y el mismo saqueo?
La infografía del “Zen” no es más que una burla: la imagen de un verdugo de la educación disfrazado de salvador.
No, Zenyazen, no son iguales. Tú aún estás libre.
Por ahora.
Redacción Reportaje Veracruzano.
