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Cateo fallido en Las Choapas: Policía destruye hogar, encierra a menor y nadie asume responsabilidad

Las Choapas, Ver. – Lo que debería haber sido un operativo de seguridad terminó convertido en pesadilla y humillación para una familia de Las Choapas. La noche del domingo, elementos de la Policía Estatal, Agentes Ministeriales, Marina, Guardia Nacional y Fiscalía General del Estado (FGE) irrumpieron violentamente en una vivienda de la calle Tabasco, colonia México, en busca de drogas y armas… que nunca existieron.

El resultado: una casa destrozada, un menor de 13 años esposado, encapuchado y amenazado, y un operativo que deja más preguntas que respuestas. La familia afectada denuncia que, ante el error flagrante, se les obligó a firmar un papel en blanco, mientras los responsables se desentendían de los daños causados.

Según relató Eradio Ventura, padre del menor, los oficiales justificaron la irrupción señalando que “el GPS los había guiado a este domicilio”, mientras una perito de la Fiscalía ofrecía disculpas que no reparan el trauma. La madre, Jovita Olán, señaló sentirse aterrada y vulnerable: “Ver a tu hijo solo, esposado y encapuchado, mientras destruyen tu hogar, es una experiencia que no se la deseo a nadie”.

Lo grave no termina ahí. La familia asegura que, al intentar interponer una denuncia formal, la fiscalía se negó a recibir su reporte, dejando al descubierto la impunidad institucional y la falta de protocolos claros para estos operativos conjuntos.

Ciudadanos y vecinos, consternados por la noticia, han compartido en redes sociales casos similares, lo que evidencia la improvisación y el riesgo extremo que enfrentan las familias ante cateos erróneos en Las Choapas.

Ante los hechos, los afectados hicieron un llamado urgente a la gobernadora Rocío Nahle García y a la fiscal general Verónica Hernández Giadáns, exigiendo que se investigue el caso a fondo y se sancione a los responsables. “Si mi hijo hubiera resultado herido o muerto, ¿quién asumiría la culpa?”, cuestionó el padre con indignación.

Este episodio no solo denuncia abuso de autoridad y negligencia, sino que pone en evidencia la fragilidad de los derechos ciudadanos frente a operativos mal planeados, donde la seguridad pública se convierte en amenaza directa para quienes deberían protegerse.


Redacción Reportaje Veracruzano

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