Veracruz en Estado de Putrefacción: La Red de Corrupción que Envenena SESVER, el IMSS-Bienestar y los Puertos del Estado

Un sistema sanitario capturado, un gobierno que calla, una ciudadanía que paga el precio.
Mientras Veracruz intenta sostenerse sobre instituciones ya debilitadas, el Estado presencia una afrenta imperdonable: la imposición de personajes señalados por corrupción en las estructuras que deberían proteger la vida, no lucrar con ella.
La más reciente—y más ofensiva—es la designación de Roberto Ramos Alor, acusado en diversas ocasiones por irregularidades, como coordinador del IMSS-Bienestar en Veracruz, una decisión que no solo insulta a los veracruzanos, sino que reabre heridas nunca cerradas: medicamentos caducos, nepotismo descarado y redes de saqueo institucional.
La enfermedad que corroe el sistema de salud no es administrativa: es corrupción.
Y hoy tiene nombre, apellidos y padrinos políticos.
LA BOMBA: Cobros ilegales en los Puertos, una red operada desde Sanidad Internacional
La propia Administración Portuaria emitió un comunicado a la Secretaría de Salud federal:
denuncias por cobros ilegales, extorsión a navieras y “moches” disfrazados de trámites sanitarios.
La dependencia federal no respondió. No suspendió. No investigó.
Simplemente calló.
El esquema es perversamente simple:
- Inspecciones sanitarias obligatorias.
- Permisos de ingreso y desembarque.
- Trámites que, por ley, deben ser gratuitos o con tarifa oficial…
…convertidos en botín para funcionarios que venden la salud pública como si fuera mercancía pirata.
Todo bajo un hilo conductor: los operadores colocados por Ramos Alor en Sanidad Internacional.
LOS NOMBRES DEL PODER OMISO Y LA RED QUE MUEVE EL DINERO
La pieza central es Jesús Gerardo Antonio Domínguez, director de Protección contra Riesgos Sanitarios y operador político cercano.
A él se suman los coordinadores de Sanidad Internacional en los puertos más estratégicos del estado:
- Horacio Cadena Hernández en Tuxpan.
- Miguel Merino Vicencio en Veracruz.
- Marco Antonio Savignon Ramos en Coatzacoalcos — sobrino de Roberto Ramos Alor.
Las denuncias apuntan en una sola dirección:
extorsión a capitanes y navieras enteras.
Cobros indebidos por procedimientos que deberían ser gratuitos.
Introducción de mercancía pirata a Veracruz bajo el amparo de funcionarios colocados y protegidos.

Todo ello en un ecosistema que depende del silencio cómplice.
Desde SESVER al IMSS-Bienestar: el ascenso del saqueo
Ramos Alor arrastra un historial conocido:
- Medicamentos caducos detectados en 2022 tras su renuncia.
- Nepotismo en cargos estratégicos.
- Control absoluto de almacenes.
- Red familiar incrustada en hospitales.
- Operadores que solo obedecen a su voz.
En la estructura:
- David Rangel Zermeño, director administrativo de SESVER, convertido en acompañante de sus giras.
- Leonel Rivera Pinete, nuevo director de Salud Pública.
- Regina Córdova Díaz, sobrina, colocada como administradora del Hospital de Veracruz.
- Enrique de la Fuente Ríos, amigo cercano.
- Alberto Artigas Amavisca, jefe de almacenes bajo órdenes directas.
- “Jefe Mario” Hernández Toledo, sobrino del secretario particular de Ramos Alor, con “barra libre” en los medicamentos.
Lo que se observa no es una institución: es una familia, una red, un consorcio operando dentro del Estado.
LA GUBERNATURA DE ROCÍO NAHLE ADMITE EL DAÑO… PERO NO ROMPE EL ESQUEMA
El propio gobierno estatal denunció un daño patrimonial superior a $1,600 millones de pesos en el Sector Salud por adjudicaciones directas, contratos anómalos y servicios subrogados.
Daño cuya semilla –señalan– se sembró justamente durante la gestión de Ramos Alor en SESVER.
Y aun así…
no hay sanciones. No hay investigaciones. No hay consecuencias.
Si el daño está acreditado, ¿por qué sigue en el poder?
Si la red está denunciada, ¿por qué está en ascenso?
Si las pruebas existen, ¿por qué el sistema lo premia?
La respuesta es tan brutal como evidente:
porque sirve a los intereses del poder.
LA CARGA EMOCIONAL: LO QUE SE ESTÁ ROMPIENDO NO ES UNA INSTITUCIÓN—ES LA CONFIANZA
En los puertos, el dinero fluye.
En el IMSS-Bienestar, los medicamentos caducan.
En los hospitales, los familiares de funcionarios ocupan los cargos clave.
En las comunidades pobres, siguen faltando doctores, medicinas y atención.
Y mientras tanto, Veracruz observa cómo se impone a un personaje señalado en el cargo más sensible de la institución que debe garantizar salud a los más pobres.
Esto no es un error administrativo.
Esto es la negación del derecho humano a la salud.
Esto es la destrucción del Estado desde dentro.
EPÍLOGO: LA VERDADERA PREGUNTA QUE TODA VERACRUZ DEBE HACERSE
¿Quién gana con la permanencia de Ramos Alor?
¿Quién protege a sus operadores?
¿Quién necesita que el sistema de salud esté capturado?
¿Quién se beneficia del silencio institucional?
Porque una cosa es clara:
Imponer a un ladrón en SESVER y luego en el IMSS-Bienestar no resuelve un problema.
Lo institucionaliza.
Lo normaliza.
Y lo convierte en política de Estado.
Veracruz no puede darse ese lujo.
La ciudadanía tampoco.
Redacción Reportaje Veracruzano



