Entre la gloria y el asfalto: joven futbolista se salva de milagro tras volcadura en Poza Rica

La delgada línea entre la promesa deportiva y la tragedia fue atravesada, aunque sin fatalidad, por Fernando, un joven futbolista pozarricense que este viernes por la mañana sobrevivió a un accidente vehicular que puso en jaque su vida y su carrera.
El reloj marcaba aproximadamente las 6:30 de la mañana cuando el silencio del Boulevard Adolfo Ruiz Cortines fue interrumpido por el estruendo del impacto. A la altura de la colonia Reforma, frente a una gasolinera y en el cruce con la calle Cuauhtémoc, el Chevrolet Beat que conducía Fernando terminó completamente volcado, con las llantas apuntando al cielo y la esperanza intacta.

Según testigos, el deportista —reconocido en ligas locales por su destreza en la media cancha— se quedó dormido al volante. «Solo pestañeó», dijeron algunos. Lo cierto es que ese pestañeo bastó para desatar el caos: perdió el control del auto, se proyectó contra una barda, y la carrocería dio un giro final que por poco termina en tragedia.
Los paramédicos municipales llegaron en cuestión de minutos. Hallaron a Fernando consciente, herido levemente y, sobre todo, conmocionado. Fue trasladado por sus familiares a una clínica privada para una revisión más exhaustiva. Aunque su cuerpo apenas presentaba moretones y raspaduras, la escena fue desoladora: el vehículo quedó en pérdida total, como constató el peritaje de Tránsito Estatal.

Mientras la Guardia Nacional apoyaba en el abanderamiento de la zona, dos carriles fueron cerrados parcialmente, provocando un cuello de botella matutino en una de las principales arterias de Poza Rica. La circulación se restableció tras más de una hora de maniobras, justo cuando el sol empezaba a bañar de oro los restos retorcidos del Beat siniestrado.
Este accidente no solo sacudió el pavimento; también encendió alertas sobre el cansancio al volante, una de las causas más silenciosas de accidentes viales en la región. ¿Cuántas vidas se han perdido por un segundo de sueño? Esta vez no fue así. Esta vez, la juventud tuvo una segunda oportunidad.
Fernando, aún con el susto entre los huesos, vivirá para contar esta historia. Y tal vez, para seguir corriendo por las canchas de Poza Rica.
Redacción Reportaje Veracruzano