Fosa clandestina en Xalapa: el horror vuelve a emerger en los cañales

Por Reportaje Veracruzano
Xalapa, Ver., 20 de junio de 2025
Una nueva fosa clandestina ha sido descubierta a las afueras de Xalapa, en una zona de cañales que comprende los poblados de El Castillo, Tronconal y Chiltoyac. El hallazgo, confirmado por autoridades estatales, ha sacudido la tranquilidad de esta región y revive el doloroso recuerdo de la violencia soterrada que continúa marcando a Veracruz.
Desde hace tres días, campesinos de la zona notaron algo extraño: fragmentos óseos sobresalían de una brecha. Al principio, pensaron que se trataba de animales. Sin embargo, tras dar aviso a las autoridades, personal de la Fiscalía General del Estado confirmó que los restos eran humanos. La zona fue de inmediato acordonada y convertida en un sitio de intervención forense.

Las investigaciones iniciales revelaron al menos 12 puntos con deformaciones en la tierra, indicios claros de excavaciones recientes cubiertas de manera apresurada. Cada uno de estos puntos es, potencialmente, una tumba clandestina. El terreno, de aproximadamente 144 metros cuadrados, se ha convertido en el escenario de un operativo silencioso pero profundamente revelador.

Elementos de la Secretaría de Seguridad Pública, Policía Municipal, la Comisión Estatal de Búsqueda y peritos forenses trabajan con sigilo, pero los rostros serios y el lenguaje corporal del equipo técnico revelan que el hallazgo podría ser mucho más grande de lo que hasta ahora se ha informado. Las autoridades, aunque cautas en sus declaraciones, ya han confirmado el descubrimiento de restos humanos en al menos una de las fosas.
En los alrededores, crece la expectativa. Colectivos de familiares de personas desaparecidas comienzan a acercarse, con la esperanza de encontrar respuestas, aunque las condiciones en las que podrían encontrarlas sean devastadoras.
Este nuevo hallazgo vuelve a poner en evidencia el drama de las desapariciones en Veracruz, una entidad marcada por fosas que se cuentan por decenas y por un historial de impunidad que, lejos de disminuir, parece profundizarse. Mientras no haya justicia, cada metro de tierra removida podría esconder una historia truncada por la violencia.

La fosa clandestina de Xalapa es, en esencia, una herida abierta. Y cada cuerpo que se recupere será un paso más hacia la memoria, la verdad y, con suerte, la justicia.
Redacción Reportaje Veracruzano