DESAPARICIÓN FORZADA EN NOGALES: POLICÍAS MUNICIPALES INVOLUCRADOS, JÓVENES DESAPARECIDOS

La sociedad exige respuestas. Autoridades en silencio.
Nogales, Veracruz, 16 de julio de 2025 – La madrugada del martes se convirtió en una pesadilla para tres familias del fraccionamiento El Encinar, cuando sus hijos —tres jóvenes de entre 18 y 25 años— fueron detenidos por elementos de la Policía Municipal de Nogales. Desde entonces, no se sabe nada de ellos.
Testigos presenciales, grabaciones de llamadas y fotografías señalan con contundencia que los jóvenes fueron interceptados y subidos por la fuerza a patrullas oficiales de la corporación municipal. A pesar de que familiares acudieron a las instalaciones de seguridad para exigir información, las autoridades negaron tenerlos bajo custodia.
“Fueron levantados por policías y no aparecen. Esto es una desaparición forzada, un crimen de Estado”, denunció un familiar en redes sociales, quien también aseguró que ya se presentaron quejas formales ante la Comisión Estatal de Derechos Humanos y la Fiscalía General del Estado, sin respuesta efectiva hasta el momento.
Las sospechas sobre la cadena de mando apuntan directamente a una figura temida en la zona: una persona conocida como “El Pancho”, presuntamente jefa de plaza vinculada al Cártel de Jalisco Nueva Generación (CJNG), quien operaría con protección institucional dentro de la Policía Municipal de Nogales. De acuerdo con testimonios recogidos, esta persona ha sido señalada previamente por su posible participación en desapariciones y otros crímenes graves, sin que las autoridades actúen en su contra.
¿Cómo es posible que una estructura criminal opere con el uniforme de la ley?
¿Dónde están los tres jóvenes? ¿Por qué las cámaras, los mandos y los registros desaparecen cuando se trata de crímenes cometidos desde dentro?
La omisión institucional no es casualidad: es complicidad. La desaparición forzada es un delito de lesa humanidad. Y hoy, en Nogales, parece haberse cometido a plena luz de la impunidad.
La sociedad exige: ¡Vivos se los llevaron, vivos los queremos!
El familiar que hizo pública la denuncia advirtió que si no hay una respuesta inmediata, el caso será llevado a instancias nacionales e internacionales:
“Yo, como ciudadano y familiar, no me voy a quedar callado. Esto no se va a archivar como otro caso más en Veracruz. Vamos a llegar hasta donde sea necesario para que aparezcan”.
Mientras las autoridades guardan silencio, el miedo crece entre los habitantes de El Encinar y municipios vecinos. Y la pregunta retumba en cada esquina: ¿quién será el siguiente?
Redacción Reportaje Veracruzano