Ajedrez PolíticoVeracruz

El circo de Nahle: acarreo forzado, incompetencia logística y la vergüenza de gobernar Veracruz


Xalapa, Ver., 4 de septiembre de 2025. – Lo que se suponía sería una demostración de fuerza política, se ha convertido en un retrato descarnado de la improvisación y el autoritarismo del gobierno de Norma Rocío Nahle García.

Fuentes internas confirmaron que dependencias estatales como la SSP, SEFIPLAN, PC, Turismo, SEDESOL y SEDARPA recibieron la orden expresa de obligar a trabajadores de base y de contrato a asistir con acompañantes al evento de la presidenta Claudia Sheinbaum en Veracruz, con el único objetivo de rellenar el Estadio “Beto” Ávila. La instrucción es clara: si no se acarrea, el estadio luce vacío.

Este acarreo disfrazado de respaldo popular no solo desnuda la falta de convocatoria real de la gobernadora, sino que exhibe un modus operandi añejo, propio de las peores prácticas del PRI que Morena prometió enterrar.

Pero el colapso de credibilidad no termina ahí. La sede original del evento era el WTC de Boca del Río, anunciada con bombo y platillo por la propia gobernadora. Sin embargo, la realidad volvió a cobrar factura: la directora del recinto, Laura Alicia Abaunza Goicochea, tuvo que aclarar que el inmueble ya estaba reservado para otro evento con meses de anticipación.
El “oso” político quedó sellado: incompetencia en la Secretaría de Turismo, encabezada por Igor Fidel Roji López, señalado además de traidor en corrillos políticos, y un equipo de logística que exhibe impericia y falta de preparación.

El “tremendo ridículo” dejó a Nahle sin más opción que improvisar, trasladando la visita presidencial al Estadio “Beto” Ávila. Una decisión que, lejos de mostrar fortaleza, terminó en un operativo masivo de acarreo que recuerda más a la era de los caciques autoritarios que a un gobierno de “transformación”.

Mientras tanto, la gobernadora insiste en rodearse de funcionarios mediocres e inexpertos, que la exponen públicamente y la obligan a recomponer discursos y estrategias. La pregunta es inevitable: ¿hasta cuándo Veracruz tendrá que soportar la ineficiencia y la simulación de un gobierno que se promociona con fuerza prestada y aplausos obligados?

El 7 de septiembre, cuando Claudia Sheinbaum pise Veracruz, no encontrará un estadio lleno de respaldo popular, sino un espacio inflado con trabajadores presionados, familias acarreadas y un aparato gubernamental convertido en maquinaria de utilería política.

Un espectáculo grotesco que confirma lo que muchos ya sospechaban: Veracruz se gobierna con improvisación, miedo y simulación.


Redacción Reportaje Veracruzano

Publicaciones relacionadas

Botón volver arriba