La Foto del Cinismo: Cazarín y Adanely Se Burlan del Pueblo en Plena Visita Presidencial
Poza Rica, Ver., 8 de septiembre de 2025. – La política veracruzana volvió a exhibir su peor rostro. En medio de señalamientos de fraude electoral, el delegado de Bienestar en Veracruz, Juan Javier Gómez Cazarín, decidió posar sonriente junto a la excandidata de Morena en Poza Rica, Adanely Hernández, durante la visita oficial de la presidenta Claudia Sheinbaum al estado. La instantánea, compartida en redes sociales, desató indignación inmediata y fue interpretada como una afrenta abierta contra la ciudadanía.
La imagen es más que un retrato: es la confirmación del descaro político. Cazarín, acusado de presionar a consejeros del OPLEV y magistrados del Tribunal Electoral de Veracruz para torcer la voluntad ciudadana, aparece celebrando con la candidata que perdió en las urnas y que hoy pretende revertir el resultado por la vía de las impugnaciones.
Mientras la Sala Regional del TEPJF analiza los recursos relacionados con la elección en Poza Rica, la postal pública de ambos personajes manda un mensaje inequívoco: los intereses del grupo pesan más que el sufragio popular.
“Es la foto del descaro político: mientras el pueblo de Poza Rica exige respeto a su voto, ellos se retratan riéndose del sufrimiento de la gente, convencidos de que el poder y el dinero público los blindan de cualquier consecuencia”, denunciaron ciudadanos en redes sociales.
El contexto agrava el cinismo: en Poza Rica la inseguridad no da tregua, el agua escasea, los servicios públicos están colapsados y la corrupción municipal es inocultable. Sin embargo, los operadores de Morena prefieren las sonrisas frente a la lente y el exhibicionismo político en lugar de atender la tragedia cotidiana que padecen miles de familias.
Diversas voces señalaron que la fotografía no solo desnuda la soberbia de sus protagonistas, sino también la estrategia del oficialismo para legitimar desde la cercanía presidencial lo que no pudieron ganar en las urnas.
En los hechos, la foto de Cazarín y Adanely se convierte en un símbolo: el retrato de una clase política que se ríe del pueblo, que exhibe sin pudor la alianza entre operadores y candidatos derrotados, y que manda un mensaje de impunidad en un estado donde la democracia sigue bajo amenaza.
La postal, ya bautizada como “la foto del cinismo”, no es un accidente: es una declaración. Una burla. Y, sobre todo, un recordatorio brutal de que en Veracruz, para muchos políticos, la voluntad popular es un obstáculo a vencer, no un mandato que respetar.
Redacción Reportaje Veracruzano
