Texistepec en crisis: entre mantas del crimen y un gobierno rebasado

La ciudadanía acusa abandono, inseguridad y vacío de autoridad; la presidenta del Concejo Municipal, Nancy Leaños, en el centro de las críticas.
Texistepec, Ver.– El municipio de Texistepec se hunde en una crisis que combina miedo, hartazgo y desconfianza hacia sus autoridades. En menos de una semana, dos mantas con mensajes intimidatorios y presunto trasfondo delictivo aparecieron en distintos puntos de la localidad, evidenciando la vulnerabilidad de un gobierno local que, lejos de generar confianza, es acusado de encubrir la violencia que azota a la región.
El primer mensaje apareció el miércoles en pleno bulevar Juan de la Luz Enríquez, el corazón del municipio. Tres días después, un nuevo texto fue colocado frente al Jardín de Niños Federal “Texistepec”, en la colonia Francisco Villa. Aunque la Policía Municipal retiró la lona de inmediato y el Ejército desplegó un operativo de vigilancia, la acción no borró la sensación de zozobra: en Texistepec, el temor parece instalarse como norma.
“Peor que antes”: voces ciudadanas
Vecinos consultados, quienes prefirieron el anonimato por temor a represalias, son contundentes: “El pueblo está peor que antes, vivimos en la zozobra y sin gobierno”.
Las críticas se concentran en la presidenta del Concejo Municipal, Nancy Leaños Fernández, señalada por los habitantes de minimizar la inseguridad y encubrir una ola de delitos que incluyen asaltos a mano armada y despojo de motocicletas.
Lo que comenzó como una expectativa de estabilidad tras la destitución del exalcalde Víctor Manuel Sánchez Florentino, se ha transformado en un escenario de mayor deterioro: servicios básicos colapsados, ausencia de obra pública y constantes protestas ciudadanas que incluso han derivado en la toma del palacio municipal.
Un mensaje con destinatario político
De manera extraoficial trascendió que la segunda manta habría estado dirigida a la propia concejal Nancy Leaños, lo que refuerza la percepción de que la crisis en Texistepec dejó de ser solo un problema de inseguridad y se convirtió en una disputa política con tintes de amenaza directa.
Un municipio al borde del colapso
Entre mantas, acusaciones y la ausencia de respuestas claras, Texistepec se encuentra en una encrucijada: el gobierno municipal muestra señales de parálisis, mientras el tejido social se desgarra entre la violencia y la falta de confianza en sus autoridades.
La población exige algo elemental: recuperar la seguridad perdida. Pero en el actual escenario, la pregunta que retumba en cada esquina del municipio es inevitable: ¿quién gobierna realmente en Texistepec?
Redacción Reportaje Veracruzano