37 días de silencio y omisiones: el cirujano Marcos de Castro sigue desaparecido en Catemaco
Catemaco, Ver. — Han transcurrido 37 días desde la desaparición del cirujano plástico Marcos de Castro Román, ocurrida en una comunidad costera de Catemaco, y el caso continúa envuelto en incertidumbre, reclamos familiares y severos señalamientos contra la Fiscalía de Veracruz por presuntas omisiones.
Marcos, médico especializado en estética y de 52 años de edad, llegó hace años desde la Ciudad de México a la comunidad de El Real, un poblado de apenas 500 habitantes, donde se integró como un vecino más. Ahí construyó su casa, generó empleo y ganó el aprecio de la población por su carácter altruista y su apuesta por el ecoturismo.
La última vez que lo vieron
El 1 de noviembre, el médico citó a varias personas en su domicilio, quienes supuestamente le ofrecerían terrenos en venta. Testigos afirman haber visto una camioneta blanca llegar a la vivienda. Horas después, observaron salir la camioneta de Marcos, seguida por el mismo vehículo, a alta velocidad.
Días más tarde, vecinos encontraron la casa abierta y con señales claras de convivencia interrumpida: envases abiertos y cigarrillos en la sala. Desde entonces, Marcos no volvió a comunicarse con nadie.
“No sabemos si fue engañado o se lo llevaron por la fuerza, pero se lo llevaron”, resume uno de sus amigos más cercanos.
Una investigación que llegó tarde
La denuncia fue presentada ante la Fiscalía Regional de San Andrés Tuxtla, pero la familia asegura que la ficha de búsqueda se emitió casi dos semanas después, retraso que consideran injustificable.
La acusación es directa contra el fiscal regional Benito Carrasqueda, a quien señalan por negligencia y falta de actuación inmediata. Aseguran que la mayoría de las diligencias se realizaron solo tras presión directa de la familia y no por iniciativa institucional.
Por ello exigen que el caso sea atraído por la Unidad Especializada en Combate al Secuestro (UECS), ante la posibilidad de una privación ilegal de la libertad.
Buscarlo con las manos y con el corazón
Ante la falta de respuestas, la familia solicitó apoyo de la Comisión Nacional de Búsqueda, que desplegó recorridos por selva, ríos, lagunas y caminos rurales, con respaldo del Ejército Mexicano y la Guardia Nacional.
Tras jornadas exhaustivas, la camioneta del médico fue localizada, pero su paradero sigue siendo desconocido. Habitantes de la región se han sumado a las búsquedas, convencidos de que Marcos merece volver a casa.
El proyecto detenido, la esperanza viva
En El Real, su proyecto Magia de Luna permanece inconcluso. Las cabañas, la palapa y la visión de empleo para más de 20 familias siguen ahí, esperando.
“Creemos que está vivo”, insisten sus familiares.
Lo que exigen ahora no es compasión, sino acciones reales, resultados y verdad.
Porque 37 días sin respuestas no es solo una desaparición: es una falla grave del Estado.
Redacción Reportaje Veracruzano
