JUCHIQUE DE FERRER HUELE A IMPUNIDAD: ALCALDE CRUZ CUEVAS INTENTA “ENTERRAR” UNA DEUDA DE ATAÚDES CON CHEQUES SIN FONDO Y AMENAZAS

Por Reportaje Veracruzano
Juchique de Ferrer, Ver.— El Ayuntamiento de Juchique de Ferrer no solo arrastra señalamientos administrativos: ahora carga también con un escándalo que huele a impunidad, abuso de poder y cinismo profundo. Cruz Cuevas Hernández, alcalde en funciones, es señalado de intentar sepultar una deuda de 114 mil pesos con una empresa funeraria que durante más de cuatro años surtió ataúdes al municipio sin contratiempos… hasta que el edil decidió dejar de pagar.

La denunciante, Laura Ramírez González, una comerciante que afirma haber entregado 24 ataúdes a la administración municipal —vía familiares del propio alcalde— reveló que Cuevas Hernández no solo ha incumplido desde hace dos años, sino que habría intentado saldar el adeudo con un cheque sin fondos, el cual exhibió públicamente durante una conferencia de prensa.

La situación, lejos de ser solo un conflicto comercial, ha puesto en riesgo la estabilidad económica y la salud de la proveedora. Ramírez González padece insuficiencia renal y declaró que la empresa para la que trabaja está por retirarle la camioneta “Frontier” que utiliza para sus entregas, debido a que el adeudo quedó a su nombre al surtir los féretros solicitados por el municipio.
Pero la historia se oscurece aún más. Según su testimonio, al exigir el pago, Cruz Cuevas Hernández la habría amenazado, advirtiéndole que no liquidaría la deuda si ella continuaba denunciando el caso en redes sociales. Aun así, el alcalde habría prometido pagar antes del 5 de diciembre… promesa que, como todas las anteriores, no cumplió.

La proveedora asegura contar con audios y mensajes en los que el presidente municipal —presuntamente— la tranquiliza con excusas recurrentes: “mañana”, “la próxima semana”, “ya casi”. Palabras vacías que, asegura, solo han servido para prolongar la deuda y desgastar su situación personal.

La mujer pidió públicamente la intervención del alcalde electo, Hubertindo, para que la administración sea entregada sin adeudos y ella pueda recuperar el dinero que le corresponde por un servicio ya entregado y plenamente acreditado.

Aunque Cuevas Hernández no ha ofrecido una postura clara, el caso abre preguntas incómodas:
– ¿Cómo opera la adquisición de servicios funerarios en Juchique de Ferrer?
– ¿Por qué el municipio mantiene un adeudo de dos años por un servicio básico?
– ¿Qué otras deudas o irregularidades quedarán al descubierto al finalizar la administración?

Con un cheque rebotado sobre la mesa, testimonios que apuntan a amenazas y un proveedor vulnerado económicamente, la crisis en Juchique de Ferrer deja claro que la transición municipal no solo será administrativa: será también un examen de decencia pública y rendición de cuentas.
Lo que está por verse es si la deuda se paga… o si el alcalde pretende, una vez más, enterrarla.
Redacción Reportaje Veracruzano



