Tribuna bajo presión: oposición denuncia cerco político antes de la toma de protesta de la nueva Fiscal
Xalapa, Ver.— En una escena que tensó el ambiente del Congreso local, el diputado del PRI, Héctor Yunes Landa, denunció que a legisladores de oposición se les intentó impedir el acceso a la tribuna previo a la toma de protesta de Lisbeth Aurelia Jiménez Aguirre como nueva titular de la Fiscalía General del Estado.
La advertencia no fue retórica. Ante el riesgo de que se les negara la palabra, Yunes Landa abandonó momentáneamente el Pleno para buscar un megáfono, decidido a fijar postura aun fuera de los canales institucionales si era necesario. El gesto fue interpretado como una señal de alarma sobre el clima político que rodeó la designación.
El legislador priista calificó como “peligrosa” la propuesta enviada por la gobernadora Rocío Nahle García, al considerar que la autonomía de la Fiscalía queda comprometida desde el origen. A su juicio, la designación arrastra una consecuencia directa: la mandataria estatal asume una corresponsabilidad política por las decisiones, errores o posibles irregularidades que se generen en el órgano autónomo.
“La autonomía, prácticamente, se acabó. La Fiscal pasa a ser parte del gabinete de facto. Todo lo que ocurra en la Fiscalía será responsabilidad de quien la propuso”, sostuvo en declaraciones ante medios, subrayando que la narrativa oficial omitió ese costo político.
Yunes Landa fue más allá al anticipar un escenario de represalias. Reconoció que, por las denuncias que ha presentado contra Jiménez Aguirre y contra quien fue su secretario particular, David Cardeña Ortega, podrían intentar abrirle carpetas de investigación sin sustento. “Pueden buscarlas. No van a encontrar nada. Los conozco”, afirmó, dejando entrever desconfianza en el uso político de la procuración de justicia.
El episodio dejó una postal incómoda para el arranque de la nueva Fiscal: una toma de protesta marcada por señalamientos de cerrazón, acusaciones de pérdida de autonomía y un Congreso donde la oposición advierte que, incluso antes de hablar, ya intentaban callarla. En Veracruz, el relevo en la Fiscalía comenzó no con consensos, sino con megáfono en mano y la tribuna en disputa.
Redacción Reportaje Veracruzano
