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Consternación en Poza Rica: comerciante es hallado sin vida en el Parador Urbano

Poza Rica, Ver. — Una fuerte movilización de fuerzas de seguridad se desató la tarde del martes 30 de septiembre en el corazón de la ciudad, tras el hallazgo del cuerpo sin vida de un comerciante en el mercado “Los Portales”, conocido popularmente como El Parador Urbano.

El descubrimiento se produjo luego de que locatarios reportaran al número de emergencias 911 olores fétidos provenientes de un local abandonado, ubicado a un costado de los sitios de taxis de la zona centro. Al arribar, elementos de la Policía Municipal, la Secretaría de Seguridad Pública del Estado, el Ejército Mexicano y la Marina Armada de México confirmaron la presencia del cuerpo.

Paramédicos de Salud Municipal constataron que el hombre, identificado posteriormente como Francisco Ramírez, de aproximadamente 55 años, ya no contaba con signos vitales y presentaba un avanzado estado de descomposición. El ahora occiso era conocido entre comerciantes y transeúntes, pues se dedicaba a la venta de dulces frente a la tienda Coppel y solía pernoctar en el sitio donde finalmente fue localizado.

La escena se tornó aún más dolorosa cuando su esposa arribó tras ser notificada por las autoridades, revelando que llevaba varios días sin regresar a casa.

Peritos de la Fiscalía General del Estado (FGE), en coordinación con la Policía Ministerial, realizaron el levantamiento del cuerpo y las diligencias de rigor. Técnicos de Protección Civil tuvieron que intervenir para forzar la entrada al inmueble, que se encontraba cerrado con cadena y candado, a fin de permitir el acceso a los especialistas forenses.

El cuerpo fue trasladado al Servicio Médico Forense (SEMEFO) para la necropsia correspondiente, mientras familiares iniciaron el procedimiento legal para reclamarlo y brindarle sepultura.

El hallazgo generó consternación entre comerciantes y visitantes del mercado, quienes permanecieron bajo tensión durante las horas que duró el operativo, mientras la zona se mantenía acordonada bajo estrictas medidas de seguridad.
El caso de Francisco Ramírez pone nuevamente en relieve la vulnerabilidad de cientos de trabajadores informales que, sin acceso a vivienda digna ni seguridad social, pernoctan en espacios improvisados en los centros urbanos. Su muerte no solo ha cimbrado a los locatarios del Parador Urbano, sino que también plantea preguntas sobre la atención institucional hacia los sectores más desprotegidos de Poza Rica.


El caso de Francisco Ramírez pone nuevamente en relieve la vulnerabilidad de cientos de trabajadores informales que, sin acceso a vivienda digna ni seguridad social, pernoctan en espacios improvisados en los centros urbanos. Su muerte no solo ha cimbrado a los locatarios del Parador Urbano, sino que también plantea preguntas sobre la atención institucional hacia los sectores más desprotegidos de Poza Rica.


Redacción Reportaje Veracruzano

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