
Yanga, Ver., 27 de octubre de 2025. — La crisis por la falta de agua potable en Yanga alcanzó su punto crítico este lunes, cuando habitantes de la comunidad de Palmillas tomaron el pozo de bombeo y las oficinas locales de la Comisión de Agua del Estado de Veracruz (CAEV) en señal de protesta, tras seis meses de suministro irregular.
Los vecinos denunciaron que el sistema hidráulico está obsoleto, con equipos de bombeo deteriorados y constantes fallas que impiden la distribución de agua a los hogares. A pesar de los múltiples reportes presentados ante la CAEV, las familias aseguran que no se han implementado acciones concretas para solucionar el problema de manera definitiva.
Durante la protesta, los habitantes exigieron la presencia de representantes estatales y un compromiso formal para reparar y modernizar la infraestructura, argumentando que la falta de agua los ha obligado a comprar pipas particulares, lo que representa un gasto adicional considerable.
Hasta el momento, la CAEV no ha emitido posicionamiento oficial sobre la protesta ni sobre los planes para restablecer el servicio.
Este conflicto pone en evidencia la fragilidad de la infraestructura hidráulica en Yanga y la urgencia de una revisión integral e inversión sustancial, para garantizar el acceso al agua potable, un derecho básico consagrado en la Constitución. La situación ha convertido a este problema en una de las principales demandas sociales de la región, mientras los vecinos buscan que su voz sea escuchada y atendida de manera efectiva.
Redacción Reportaje Veracruzano



