Escándalo en Tihuatlán: Policías Estatales de Caminos protagonizan accidente presuntamente ebrios y a exceso de velocidad

Por Redacción Reportaje Veracruzano
Tihuatlán, Ver. — Lo que debía ser una jornada de vigilancia terminó en vergüenza y cuestionamientos para la Secretaría de Seguridad Pública del Estado de Veracruz (SSP). Un grupo de elementos adscritos a la Policía Estatal de Caminos sufrió un aparatoso accidente la mañana de este martes 28 de octubre de 2025, sobre la carretera Tihuatlán–Álamo, presuntamente tras conducir en estado de ebriedad y a exceso de velocidad.
De acuerdo con los primeros reportes, los uniformados viajaban en una patrulla oficial bajo el mando del supervisor identificado como “Guerrillero”, cuando perdieron el control del vehículo y terminaron volcados fuera de la carpeta asfáltica. Aunque no se reportaron víctimas mortales, se desconoce el estado de salud de los oficiales involucrados, lo que ha generado especulaciones sobre la gravedad de sus lesiones.
El percance no solo dejó un vehículo estatal destrozado, sino también una ola de indignación entre los habitantes de Tihuatlán y Álamo, quienes denuncian que los mismos agentes encargados de hacer cumplir las normas viales son quienes las violan con total impunidad.
“¿Cómo vamos a confiar en una Policía de Caminos que maneja borracha?”, expresó uno de los testigos, reflejando el sentir generalizado en la zona norte del estado.
La Policía Estatal de Caminos fue presentada recientemente por el gobierno estatal como una corporación especializada en seguridad y cultura vial, sin embargo, este incidente pone en entredicho su disciplina, su ética y el proceso de selección de sus integrantes.
Organizaciones ciudadanas y colectivos locales exigieron la intervención inmediata del área de Asuntos Internos de la SSP, para que se investigue el caso a fondo y se sancione conforme a la ley a los elementos responsables.
“No puede haber dos varas de medir: si un civil maneja ebrio, va detenido; si un policía lo hace, debe enfrentar las mismas consecuencias”, reclamaron activistas de Poza Rica y Tihuatlán.
Hasta el cierre de esta edición, la Secretaría de Seguridad Pública del Estado de Veracruz no ha emitido ningún posicionamiento oficial, lo que ha incrementado el malestar social y alimentado la percepción de encubrimiento dentro de la corporación.
Mientras tanto, el accidente se suma a una larga lista de episodios que cuestionan la credibilidad de las fuerzas del orden en Veracruz, donde los escándalos, abusos y errores institucionales parecen convertirse en la nueva rutina de quienes deberían garantizar la seguridad ciudadana.
Redacción Reportaje Veracruzano



