TUXPAN EN ROJO: EJECUCIÓN A PLENA LUZ DEL DÍA EXHIBE EL COLAPSO DE LA SEGURIDAD EN EL CORAZÓN DEL PUERTO

Tuxpan, Ver., 20 de noviembre de 2025.—
La violencia volvió a irrumpir sin pudor en el centro de Tuxpan. Un hombre fue ejecutado a balazos la tarde de este jueves en la calle Heroica Veracruz, a unos pasos del colegio Regina Núñez y en plena zona transitada, en un episodio que desnuda —una vez más— la incapacidad institucional para contener a los grupos armados que operan con total impunidad.
De acuerdo con los primeros reportes, la víctima —preliminarmente identificada como Ernesto “N”, de unos 38 años— caminaba por la Heroica Veracruz, entre Mariano Escobedo e Ignacio Zaragoza, presuntamente para recoger a uno de sus hijos. No llegó. Sicarios armados lo interceptaron y le dispararon a quemarropa frente a vecinos, transeúntes y padres de familia que, aterrados, se resguardaron mientras los agresores huían sin resistencia alguna.
Los residentes del sector, acostumbrados ya al eco de los disparos, fueron quienes alertaron al 911. Minutos después arribaron elementos de Policía Municipal, SSP estatal, Sedena, Marina y Guardia Nacional, junto con cuerpos de emergencia. Aunque se le intentó brindar atención prehospitalaria, el hombre murió en el lugar.
La zona fue acordonada mientras peritos de la Fiscalía General del Estado realizaron las diligencias y el levantamiento del cuerpo, trasladándolo al Semefo. Hasta ahora, no hay detenidos, no hay pistas oficiales y no hay claridad sobre el móvil, pero sí hay una constante: la violencia avanza y la autoridad solo llega para levantar cadáveres.
Este asesinato, cometido a plena luz del día en una avenida céntrica y cerca de un plantel escolar, vuelve a colocar a Tuxpan en el ojo del huracán y en la misma pregunta que la población repite una y otra vez:
¿Qué tan rota está la seguridad que un ataque de este calibre puede ocurrir en minutos… y los responsables simplemente se esfuman?
La Fiscalía abrió una carpeta de investigación, pero en Tuxpan —como en buena parte de Veracruz— la justicia camina con la misma lentitud con que los ejecutores escapan: sin prisa, sin vigilancia y sin consecuencias.
La tarde terminó, pero el miedo se queda.
Redacción Reportaje Veracruzano



