Ni 24 horas han pasado desde que salió a la luz un reportaje a nivel nacional que revela la presunta existencia de una red de empresas fantasma beneficiadas por programas federales como Jóvenes Construyendo el Futuro y 65 y Más en Veracruz. Sin embargo, el gobierno de Cuitláhuac García, respaldado por la 4T, guarda un silencio sepulcral ante estas acusaciones.
La pregunta que surge es: ¿por qué el director de comunicación social de Veracruz, Iván Luna Landa, considera que no es importante dar una postura oficial sobre este escándalo? ¿Acaso el teléfono se le descompuso, o es que prefieren ignorar el problema en lugar de enfrentarlo?
Esta actitud de desdén y soberbia por parte de las autoridades solo alimenta la desconfianza y el escepticismo hacia el gobierno. En lugar de transparentar y abordar los posibles casos de corrupción, parecen optar por el encubrimiento y la indiferencia.
Es hora de que el gobierno de la 4T en Veracruz demuestre verdadero compromiso con la transparencia y la rendición de cuentas. No basta con proclamar un cambio, hay que actuar en consecuencia. La ciudadanía merece respuestas claras y acciones concretas frente a estas graves acusaciones de corrupción.
Opinión de Marco Antonio Palmero Alpirez
Reportaje Veracruzano
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