Sangre y horror en San Isidro: un anciano lucha por su vida tras ser macheteado en Tlapacoyan

La violencia alcanza hasta los más indefensos; autoridades investigan un brutal ataque que estremece a la región
Tlapacoyan, Ver. – En un hecho que refleja la creciente crueldad que azota las comunidades rurales de Veracruz, un hombre de la tercera edad fue víctima de un brutal ataque a machetazos en la comunidad de San Isidro, perteneciente al municipio de Tlapacoyan. El anciano, cuyo nombre aún no ha sido revelado, fue encontrado malherido en un camino que conduce a la colonia conocida como “Barrio Pobre”, escenario del violento suceso.
Vecinos relataron haber escuchado gritos desesperados que rompieron la tranquilidad de la tarde. Al salir de sus viviendas, se toparon con una escena desgarradora: el cuerpo del senecto cubierto de sangre, con heridas profundas provocadas por un arma blanca. De inmediato, alertaron a las autoridades locales.
Elementos de la Policía Municipal y Estatal arribaron al lugar para acordonar la zona y comenzar las diligencias, mientras paramédicos de Protección Civil brindaban los primeros auxilios al herido, quien fue trasladado de emergencia a un hospital cercano debido a la gravedad de sus lesiones.
El ataque ha generado consternación e indignación entre los habitantes, que señalan que la inseguridad se ha recrudecido en los últimos meses sin que existan resultados visibles por parte de las autoridades.
Hasta ahora se desconoce quién o quiénes perpetraron la agresión ni cuál pudo haber sido el motivo. Las investigaciones están en curso, pero el silencio y el miedo reinan entre los vecinos, que prefieren no hablar por temor a represalias.
El caso de San Isidro vuelve a poner en evidencia la vulnerabilidad de los adultos mayores en comunidades donde la violencia se ha convertido en una sombra cotidiana, una que ni la distancia del campo ni la edad logran disipar.
“Ya no se respeta ni a los viejitos”, lamentó una vecina, con voz temblorosa, mientras observaba el rastro de sangre sobre el camino de terracería.
Las autoridades prometen esclarecer los hechos, pero mientras tanto, un anciano libra su batalla más dura: la de sobrevivir a la barbarie.
Redacción Reportaje Veracruzano



