Morena en Veracruz: Crisis interna y corrupción amenazan alcaldías 2025
Morena, el partido que alguna vez se presentó como la gran esperanza de transformación en México, se encuentra al filo del colapso en Veracruz. La promesa de regeneración política se ha desmoronado bajo el peso de la corrupción, el nepotismo y la ambición desmedida. Lo que se perfilaba como una victoria arrolladora en las municipales de 2025 se ha convertido en un campo minado de traiciones, imposiciones y compraventa de candidaturas, un lodazal que ni la gobernadora Rocío Nahle puede ocultar.
Veracruz siendo una entidad de riqueza cultural y económica, enfrenta una crisis política profunda. Los principales municipios de las regiones norte, central y sur se ven envueltos en escándalos de corrupción y nepotismo que erosionan la confianza ciudadana en el partido gobernante.
De acuerdo con fuentes internas del partido, Morena había proyectado ganar el 98% de las alcaldías en el estado. Sin embargo, la realidad ha sido un golpe de agua helada: ahora luchan por un 40% y la tendencia sigue a la baja. En ciudades clave como Túxpan, Poza Rica, Tihuatlán, Xalapa, Orizaba, Boca del Río y en municipios del sur en Cosoleacaque, entre otros municipios.
Región Norte: Poza Rica y la Malversación de Fondos
En Poza Rica, uno de los municipios más representativos de la región norte, se detectó un presunto daño patrimonial significativo. El Órgano de Fiscalización Superior (Orfis) identificó irregularidades financieras que contribuyen a un total de más de 43 millones de pesos desviados en cinco municipios gobernados por Morena durante el ejercicio fiscal de 2022. Estas anomalías reflejan una gestión deficiente y prácticas corruptas que afectan directamente a la ciudadanía, sin que los municipes que gobiernan den los datos precisos de sus municipios; destacando el alcalde Fernando Luis Remes Garza quien no ha informado claramente lo que está pasando con las irregularidades en su gestión, y su cercana, la diputada Janeth Adanely Rodríguez Rodríguez, antes directora de Comunicación Social del ayuntamiento, pronto dejará de ser diputada, si gana la alcaldía de Poza Rica por Morena, señalada de encubrir directamente todos los inconvenientes en la gestión del alcalde también conocido como «Pulpo» Remes.
Región Central: Xalapa y el Descontento por Designaciones
En la capital del estado, Xalapa, las decisiones internas de Morena han generado controversia. A pesar de que las autoridades morenistas confían en mantener el control de la alcaldía en las próximas elecciones, la falta de transparencia en la selección de candidatos ha provocado descontento entre la militancia y la ciudadanía. La imposición de candidatos sin consenso podría traducirse en una disminución del respaldo popular. Daniela Griego Ceballos se perfila como candidata de Morena a la alcaldía de Xalapa en medio de un proceso marcado por la imposición y la compra de candidaturas. Su designación es vista como una decisión arbitraria impulsada desde el gobierno estatal, ignorando la militancia y el respaldo popular. La inconformidad dentro del partido crece, mientras se cuestiona el uso de recursos públicos para favorecer su postulación. La gobernadora Rocío Nahle, lejos de actuar como garante de un proceso democrático, permite que figuras cuestionadas sean impuestas, desatando descontento y dudas sobre la legitimidad de las designaciones dentro del partido.
Región Sur: Coatzacoalcos y la Corrupción Judicial
Coatzacoalcos enfrenta serias acusaciones de corrupción en el ámbito judicial. Víctimas de violencia vicaria atacadas por integrantes de Morena han denunciado irregularidades en el Juzgado Décimo de lo Familiar, señalando que, a pesar de presentar pruebas contundentes contra sus agresores, los casos no avanzan debido a prácticas corruptas dentro del sistema judicial local. Esta situación deja en estado de indefensión a las víctimas y pone en entredicho la integridad de las instituciones encargadas de impartir justicia.
Pero lo que está hundiendo aún más al partido no es solo la incompetencia de sus operadores políticos, sino la podredumbre interna que ha salido a la luz. La escandalosa venta de alcaldías al mejor postor es ya un secreto a voces, con cifras que oscilan entre los 3 y 5 millones de pesos por candidatura, o también existen claros intereses de por medio.
Manuel Huerta: El Judas de Morena o el Hombre que Desnudó la Podredumbre
En el ojo del huracán se encuentra Manuel Huerta Ladrón de Guevara, fundador de Morena en Veracruz, quien ha encendido la mecha con sus denuncias sobre el nepotismo y la venta descarada de candidaturas. De acuerdo con Huerta, al menos 80 alcaldías han sido negociadas sin pudor, colocando a personajes impuestos por grupos de poder, familiares de políticos en funciones o, peor aún, a oportunistas sin trayectoria en la 4T.
La cúpula morenista, lejos de rectificar el rumbo, ha permitido que este proceso electoral se convierta en una feria de transacciones políticas. Rocío Nahle, en lugar de limpiar la casa, ha tolerado, cuando no alentado, estas prácticas. Ejemplo de ello es la designación de Polo Deschamps, un personaje con un turbio historial, como su carta para Alvarado. En Xalapa, impone con calzador a Daniela Griego, mientras en Boca del Río apoya abiertamente a su comadre.
En Yanga, la situación es aún más grotesca. Militantes han denunciado públicamente que Daniel Rosas Luna, alias «El Yambo», pagó 5 millones de pesos para ser designado candidato a la alcaldía, a pesar de que la comunidad ya lo había rechazado en una elección anterior debido a su mala reputación. El enojo es tal que los aspirantes que sí hicieron campaña, invirtiendo en propaganda y recorridos, han sido simplemente descartados.
Un Partido en Fuga: Morena se Fractura
El descontento interno ha provocado un éxodo silencioso de militantes hacia otras fuerzas políticas. Mientras algunos han encontrado refugio en el PT y el Partido Verde, otros han optado por brincar al PAN o al PRI bajo acuerdos discretos. El proceso electoral ha quedado enredado en traiciones y reacomodos de última hora, debilitando aún más la ya tambaleante estructura de Morena en el estado.
Incluso en plazas menos disputadas, como Tlalnelhuayocan, el partido se ha visto envuelto en escándalos de nepotismo. La designación de María Emilia Nieto Miranda como promotora de la 4T ha sido ampliamente rechazada, ya que es esposa de Edgar Alberto Muñoz Alfonso, hermano de la actual alcaldesa. Un caso más donde la política se convierte en un negocio familiar.
Pero quizás el ejemplo más alarmante de la decadencia morenista se encuentra en Córdoba, donde la imposición de Manuel Alonso Cerezo ha desatado una tormenta de críticas. Cercano al exsecretario de Educación, Zenyazen Escobar, y vinculado con el llamado «Cártel de las Grúas», su candidatura es vista como una señal de que en Morena, la frontera entre política y crimen organizado se ha difuminado peligrosamente.
El Juicio de la Historia
La crisis que enfrenta Morena en Veracruz es más que una coyuntura electoral: es el síntoma de un partido que ha perdido el rumbo. Nació como un movimiento que prometía acabar con la corrupción y hoy se ahoga en sus mismas prácticas. Mientras sus líderes se reparten el poder como un botín, la militancia se desmorona y el electorado observa con creciente desencanto.
Manuel Huerta, quien ahora fustiga a su propio partido, también carga con un historial de acusaciones que lo señalan como porro, corrupto y presunto agresor sexual. Su repentina cruzada contra la corrupción en Morena podría no ser más que una estrategia para posicionarse, un ladrón gritando «¡Al ladrón!».
Lo cierto es que, en la víspera de las elecciones municipales, la pregunta ya no es si Morena podrá arrasar en Veracruz, sino cuántos municipios logrará retener antes de que su propia corrupción lo devore. El tiempo se agota y la historia no perdona.
Por: Marco Antonio Palmero Alpirez
Reportaje Veracruzano
