Una curva mortal en Laguna Verde: vuelca autobús de ADO en la carretera 180; saldo preliminar: al menos 2 muertos y más de 30 heridos

ALTO LUCERO, Ver. — Un autobús de la línea ADO GL que cubría la ruta Xalapa–Poza Rica se precipitó la noche del jueves por una ladera de la carretera federal 180, a escasos kilómetros de la central nuclear de Laguna Verde. El siniestro reaviva los temores sobre la seguridad en una vía catalogada como estratégica —es ruta de evacuación para la planta— pero con un historial de percances fatales.

Un saldo aún difuso
A primeras horas de este viernes, las cifras seguían oscilando. El portal local Quadratín Veracruz reportó al menos 35 heridos y señaló que los rescatistas continuaban extrayendo pasajeros entre el metal retorcido del autobús número 8125. Otra estimación, difundida por Sociedad 3.0, habló de una víctima mortal y 34 lesionados, mientras que televisora TV Azteca Veracruz confirmó 35 lesionados pero sin decesos al cierre de su emisión nocturna. La falta de un parte oficial unificado alimentó la incertidumbre: la Guardia Nacional —encargada del peritaje— prometió un consolidado “en las próximas horas”, sin otorgar detalles sobre posibles fallas mecánicas o exceso de velocidad.
Cronología del desastre
Según un despacho de Milenio —basado en testimonios preliminares de pasajeros— el conductor perdió el control poco después de las 22:00 horas al tomar una curva pronunciada en el tramo Actopan–Palma Sola. La unidad se deslizó fuera de la cinta asfáltica y volcó sobre su costado, quedando a varios metros del carril principal.

Ambulancias de ocho municipios —entre ellas las de Protección Civil de La Antigua, Actopan y Úrsulo Galván— improvisaron un cordón sanitario para trasladar heridos a la clínica del IMSS No. 36 y al Hospital General de Cardel. Una decena de lesionados con trauma de tórax y fracturas múltiples permanecían esta mañana bajo observación, dijeron fuentes médicas que solicitaron anonimato por no estar autorizadas a declarar.
La carretera que nunca deja de sangrar
La federal 180 es arteria crítica para la economía del Golfo y, al mismo tiempo, la única ruta de emergencia que la Comisión Federal de Electricidad contempla para una eventual evacuación de Laguna Verde. No obstante, sus curvas cerradas y el asfalto irregular han alentado una seguidilla de incidentes: desde noviembre pasado, al menos cuatro percances mayores han sido documentados por la prensa local, incluido un socavón que interrumpió la circulación durante 72 horas y obligó a desviar el tráfico por comunidades rurales poco preparadas para un flujo masivo de vehículos.
Expertos en ingeniería vial consultados por Reportaje Veracruzano señalan que, pese a las reparaciones de rutina, el tramo Laguna Verde–El Farallón “concentra más factores de riesgo por kilómetro que cualquier otra sección de la 180 en el estado”: pendiente abrupta, señalización deficiente y curvas ciegas que castigan el centro de gravedad de los autobuses de dos pisos.
ADO bajo el microscopio
El accidente ocurre apenas cinco meses después de que otro autobús de la empresa se viera implicado en un choque múltiple en el libramiento de Perote que dejó ocho personas muertas. Voceros de Mobility ADO dijeron vía correo electrónico que la compañía “cooperará plenamente con las autoridades” y que ha activado su protocolo de apoyo a víctimas, que incluye asesoría legal y gastos funerarios cuando procede.

Sin embargo, organizaciones de usuarios insisten en que la empresa debe transparentar su programa de capacitación para conductores en rutas nocturnas. “ADO transporta más de 10 millones de pasajeros al año; con ese volumen, cualquier deficiencia se multiplica”, advirtió Azucena Rojas, investigadora de movilidad de la Universidad Veracruzana.
Preguntas abiertas
¿Por qué un vehículo que partió de Xalapa a las 20:00 h —según los boletos impresos revisados por este diario— aún circulaba por Actopan dos horas más tarde, cuando el trayecto habitual no rebasa los 90 minutos?
¿Recibió la central de Laguna Verde algún aviso preventivo sobre el incidente, dado que el punto del siniestro se encuentra dentro de su perímetro de seguridad?
¿Cuándo publicará la Secretaría de Infraestructura y Obras Públicas la auditoría técnica prometida tras el socavón de noviembre?
Las respuestas podrían tardar, pero la urgencia de inversión carretera y de protocolos estrictos de verificación vehicular ya no admite aplazamiento. En la federal 180, cada kilómetro se ha convertido en una ruleta que, esta vez, volvió a cobrarse —con nombre y apellido aún por confirmar— la vida de viajeros que sólo pretendían llegar a casa.
Redacción Reportaje Veracruzano