“Fraude multimillonario” en el Pirata Fuente: ¿Quién responde por estos 1 676 millones mal gastados?

Un monumento a la corrupción, el despilfarro y la simulación de la Cuarta Transformación en Veracruz
Por Reportaje Veracruzano | Martes, 15 de julio de 2025
Veracruz, Ver. – Lo que prometía ser la joya deportiva del sureste mexicano terminó convertido en un escandaloso símbolo del fracaso gubernamental. El Estadio Luis “Pirata” Fuente, cuya “reconstrucción” fue impulsada por el entonces gobernador Cuitláhuac García Jiménez, consumió 1 676 millones de pesos del erario en una obra plagada de fallas, deficiencias estructurales y múltiples irregularidades. Lo más grave: este elefante blanco ha quedado como herencia directa de la llamada Cuarta Transformación en Veracruz.
De estadio moderno a fiasco millonario
La remodelación originalmente estaba presupuestada en 400 millones de pesos, pero sin explicaciones técnicas, el costo escaló hasta cinco veces más. Hoy, los asistentes al primer cuadrangular de fútbol observaron baños mal terminados, zonas inundadas, palcos VIP que obstruyen la vista del campo y áreas sin accesibilidad adecuada.
El resultado es grotesco: una plaza comercial disfrazada de estadio, con más lujo para unos cuantos y menos funcionalidad para los verdaderos aficionados. El “nuevo Pirata” no solo está lejos de albergar fútbol de primera división, sino que representa un insulto para la afición veracruzana.
El silencio de Rocío Nahle y la continuidad del desastre
Desde su arribo al poder, la gobernadora Rocío Nahle García ha optado por guardar un silencio cómplice respecto al desastre financiero que dejó su antecesor, y que ahora le corresponde revisar, fiscalizar y sancionar. Sin embargo, a más de siete meses de su gestión, no ha emitido una sola declaración contundente sobre el presunto desfalco en esta obra.
Ni auditorías públicas, ni revisión de contratos, ni investigación penal contra funcionarios. Nada. La continuidad del saqueo disfrazado de transformación parece estar asegurada.
¿Está Rocío Nahle dispuesta a investigar las irregularidades? ¿O protegerá a su correligionario y padrino político para no fracturar la fachada de la 4T en Veracruz?
Corrupción a la carta: contratos a modo y adjudicaciones opacas
La Auditoría Superior de la Federación ya advirtió anomalías. Dos empresas con socios en común obtuvieron contratos multimillonarios, al menos uno por 500 millones, y todo bajo el esquema de adjudicación directa o licitaciones simuladas. El propio senador morenista Manuel Huerta exigió una investigación a fondo, acusando: “Alguien entregó mal, alguien recibió mal”.
¿Dónde están los responsables? ¿Quién autorizó los pagos? ¿Quién firmó las actas de entrega-recepción? ¿Dónde está el órgano interno de control del gobierno de Veracruz? La opacidad es total.
¿Una Cuarta Transformación… para unos cuantos?
Este caso no es aislado: es el reflejo de una administración que prometió combatir la corrupción y terminó replicando sus peores prácticas. La 4T en Veracruz se tambalea bajo el peso de sus propios excesos y simulaciones, y el estadio Pirata Fuente es ahora la evidencia más visible del fracaso de ese proyecto político.
Claves del escándalo:
- Costo original: 400 millones de pesos.
- Costo final: 1 676 millones.
- Entrega incompleta, defectuosa y con vicios estructurales.
- Sin investigación, sin sanción, sin responsables.
- Gobierno de Rocío Nahle: omiso y mudo ante el saqueo.
Conclusión devastadora:
El nuevo estadio Pirata Fuente no es una obra pública; es una herida abierta, un altar al derroche y a la impunidad. Es el testamento de un gobierno que en nombre del pueblo desvió recursos, benefició a intereses privados y entregó una obra inútil, costosa y vergonzosa.
La Cuarta Transformación prometió limpiar a Veracruz, pero hoy la realidad golpea con fuerza: el lodo también manchó las gradas del Pirata.
Redacción Reportaje Veracruzano