Terror uniformado en Poza Rica: marinos y policías golpean a joven y anciano, allanan taller y hasta se roban dinero
Poza Rica, Ver. — La tarde de este sábado 30 de agosto, la colonia La Ceiba se convirtió en escenario de abuso brutal y desvergonzado por parte de quienes, en teoría, deberían proteger a los ciudadanos. Vecinos de las calles Barriozábal y Libertad denunciaron que elementos de la Marina, la Policía Estatal y la Policía Municipal irrumpieron en un taller mecánico, donde golpearon a un joven repartidor y a un anciano, además de realizar un cateo ilegal y robar dinero en efectivo.
La persecución que terminó en infierno
De acuerdo con los testimonios recabados, todo comenzó cuando los uniformados perseguían a un joven motociclista repartidor. Al sentirse acorralado, el muchacho corrió al interior del taller mecánico para refugiarse. Sin embargo, los marinos y policías lo alcanzaron, lo revisaron de manera violenta y lo golpearon sin contemplación, descubriendo al final que en su mochila solo llevaba refacciones propias de su trabajo.
El operativo se tornó aún más indignante: los elementos también agredieron físicamente a un anciano presente en el lugar, revisaron las instalaciones sin orden judicial y, según denunciaron testigos y la propia víctima, sustrajeron 3 mil pesos en efectivo, dinero que el joven destinaba para la compra de útiles escolares de sus hijos.
Vecinos indignados: de guardianes a verdugos
El hecho ocurrió alrededor de las 2:30 de la tarde y dejó a la colonia enardecida. Los vecinos, testigos del atropello, señalaron directamente a marinos y policías municipales y estatales por actuar con una violencia injustificada, como si Poza Rica estuviera bajo el yugo de escuadrones de represión y no bajo la protección de instituciones de seguridad.
Lo ocurrido desnuda una realidad alarmante: en lugar de salvaguardar el orden, los cuerpos de seguridad han convertido las calles en un campo de abuso, miedo y rapiña.
La impunidad que se repite
No es la primera vez que en Veracruz se señala a corporaciones federales, estatales y municipales por cometer atropellos contra la ciudadanía bajo el manto de supuestos operativos. La pregunta que retumba hoy en La Ceiba es clara y contundente:
¿Quién protege a los ciudadanos de los que se dicen sus protectores?
La Fiscalía General del Estado y la Secretaría de Seguridad Pública guardan silencio. Mientras tanto, la colonia La Ceiba exige justicia inmediata y castigo ejemplar para los responsables de un acto que raya en el terrorismo institucional.
Redacción Reportaje Veracruzano
