¡Vergonzosa cloaca en la Fiscalía de Veracruz! El policía que debía buscar desaparecidos… ¡los desaparecía!

Bersaín “N”, exministerial y excandidato de Movimiento Ciudadano, es detenido tras 12 años prófugo: habría secuestrado y asesinado a un campesino de 79 años, mientras lideraba la Unidad de Desaparecidos en Córdoba
Por Reportaje Veracruzano | Redacción
Veracruz, México | 21 de julio de 2025 —
El caso estremece las entrañas de un sistema de justicia podrido: Bersaín “N”, expolicía ministerial del estado de Veracruz, asignado irónicamente a la fiscalía especializada en personas desaparecidas, fue capturado en el Estado de México tras estar prófugo por más de una década. ¿El motivo? Está acusado de secuestrar, torturar y asesinar a un hombre de 79 años en 2013. No sólo eso: mientras la justicia lo buscaba, él ascendía en cargos públicos y hasta fue candidato a alcalde por Movimiento Ciudadano.
El secuestrador vestido de autoridad
El 11 de septiembre de 2013, hombres armados irrumpieron en la vivienda de J.F.J.V., un humilde criador de borregos en Rafael Delgado, Veracruz. Simularon un operativo. Viajaban en una camioneta con logos de la policía ministerial. Pero lo que siguió fue criminal: golpes, robo de pertenencias, una falsa detención sin orden judicial, y luego una llamada exigiendo 3 millones de pesos a cambio de la vida del anciano.
Cinco días después, su cuerpo apareció flotando en el río Matzinga. Había sido salvajemente torturado y asesinado con un golpe en la cabeza. Aún así, el dolor de la familia fue acallado por el miedo. Sabían quién lo había hecho: su propio vecino y policía ministerial, Bersaín “N”.
Lo denunciaron, pero por años reinó la impunidad.
Del crimen a las urnas: el ascenso de un verdugo
Lejos de ser investigado, Bersaín “N” fue premiado con cargos cada vez más sensibles. Llegó a la Fiscalía de Personas Desaparecidas en Córdoba, donde investigó casos similares al que él mismo había perpetrado. Un zorro cuidando el gallinero.
En 2021, Movimiento Ciudadano le abrió las puertas de la política, haciéndolo candidato a la alcaldía de Rafael Delgado. Perdió, pero su ambición no se detuvo. Ese mismo año, la Fiscalía finalmente intentó detenerlo. Fallaron. El exministerial escapó gracias al apoyo de familiares, dos de los cuales fueron detenidos por encubrimiento.
Cuatro años después, el 19 de julio de 2025, fue capturado en Tlalnepantla, Estado de México. Esta vez no escapó. Hoy, Bersaín “N” duerme tras las rejas del penal de mediana seguridad en La Toma, Amatlán de los Reyes, mientras se inicia el proceso penal 003/2021 por secuestro agravado.
Más casos, más corrupción: la red putrefacta en la Fiscalía de Córdoba
Pero su historial oscuro no termina ahí. Bersaín también está implicado en la desaparición de los hermanos poblanos Sergio y Liliana Rueda, quienes acudieron a pagar un rescate en Córdoba en 2019 y nunca más fueron vistos.
En ese caso trabajó codo a codo con su jefa, Fabiola Melo González, entonces fiscal de desaparecidos, quien fue acusada de cobrar 29 mil pesos a la familia Rueda para realizar actos de búsqueda que jamás ocurrieron. Fabiola Melo enfrenta actualmente juicio por corrupción.
Nallely Guarneros, esposa de Sergio, denunció que además de la extorsión, elementos clave de la investigación fueron borrados deliberadamente: testimonios, evidencias y hasta una motocicleta vinculada al caso, que terminó en casa de Bersaín “N”. Él la entregó de forma informal, sin papeles, sin protocolo. ¿La razón? “Para no molestarte”, le dijo a la mujer desesperada por encontrar a sus familiares.
Un símbolo del cáncer institucional
Lo ocurrido con Bersaín “N” es mucho más que la caída de un exfuncionario. Es una radiografía del cáncer que corroe la estructura de justicia en Veracruz. Policías que secuestran. Fiscales que extorsionan. Víctimas silenciadas por el miedo. Y partidos políticos dispuestos a cobijar a cualquier criminal que se ponga una corbata.
¿Cómo llegó tan lejos sin ser detenido? ¿Quién lo protegió durante tantos años? ¿Por qué Movimiento Ciudadano ignoró su pasado? ¿Cuántos más como él operan aún impunes dentro de la Fiscalía?
La detención de Bersaín “N” no es una victoria de la justicia: es una confesión del sistema. Un sistema que supo todo… y no hizo nada.
Redacción: Reportaje Veracruzano