Tuxpan en Crisis: La Oscura Realidad detrás del Mandato de Jesús Fomperoza Torres
Tuxpan, Veracruz – La administración del alcalde Jesús Fomperoza Torres está bajo la lupa. El silencio y la opacidad caracterizan la actuación de las autoridades municipales frente a un caso que podría ser el más alarmante de su gestión: la muerte sospechosa de un detenido en las celdas de la Comandancia de la Policía Municipal. A pesar de contar con cámaras de vigilancia, nadie en la corporación notó el cuerpo colgado de los barrotes hasta pasadas siete horas. ¿Suicidio o encubrimiento de un asesinato? La falta de transparencia y las irregularidades en el procedimiento despiertan serias dudas sobre lo ocurrido.
Los hechos ocurrieron alrededor de las 03:00 am cuando agentes de la Policía Estatal llevaron a un detenido y descubrieron el cuerpo sin vida. Hasta el momento, la comandancia ha optado por el silencio, negándose a revelar quiénes estaban de turno y remitiendo a los periodistas al departamento jurídico, un muro de contención que impide la transparencia en un caso de tal gravedad.
El secretario de Seguridad Pública Municipal, Guillermo Alan, y el director de la corporación, Raymundo Torres Cruz, gozan de la protección del alcalde Fomperoza. Los rumores de abusos de autoridad, extorsión y negligencia son la constante en la administración de ambos funcionarios, mientras que el alcalde parece mirar hacia otro lado, permitiendo que estas prácticas continúen.
La ciudadanía de Tuxpan está harta. Las extorsiones de la policía vial a automovilistas y motociclistas, con cobros que oscilan entre 300 y 1000 pesos, son un secreto a voces. ¿Quién supervisa estas acciones? Al parecer, nadie. La llegada de Karen Berman, conocida por su historial de corrupción, sólo ha intensificado las sospechas de un esquema corrupto que opera con el beneplácito de las autoridades municipales.
Es imperativo que la fiscalía actúe con imparcialidad y realice una investigación exhaustiva sobre la muerte del detenido. La ciudadanía exige respuestas claras y justicia. Mientras tanto, el alcalde Jesús Fomperoza Torres debe asumir su responsabilidad y dejar de proteger a funcionarios que dañan la integridad de Tuxpan.
El grito de auxilio de Tuxpan es claro: basta de corrupción, abuso y encubrimiento. La administración actual tiene la obligación de restaurar la confianza perdida y garantizar la seguridad y justicia que el pueblo merece.
Redacción Reportaje Veracruzano
