CorrupciónEstatalVeracruz

Congreso de Veracruz Blinda a Cuitláhuac García: Aprueban su Cuenta Pública Pese a Presunto Daño Patrimonial de Más de 829 Millones de Pesos

Xalapa, Ver., 31 de octubre de 2025 — La impunidad institucionalizada volvió a hacer eco en el Congreso de Veracruz. Con el sello del oficialismo, los diputados locales aprobaron la Cuenta Pública 2024 del gobernador Cuitláhuac García Jiménez, a pesar de los presuntos daños patrimoniales que ascienden a 829 millones 397 mil 442 pesos con 45 centavos. Un aval político que, lejos de fortalecer la rendición de cuentas, la sepulta entre reservas, ambigüedades y complicidades.

El diputado morenista Esteban Bautista Hernández intentó maquillar la votación asegurando que la aprobación se dio “con reservas”, y prometió que “quien tenga que responder, tendrá que responder”. Sin embargo, su declaración suena más a coartada que a compromiso. Porque los números no mienten: la Secretaría de Finanzas detectó irregularidades por 1,113 millones de pesos, y el Órgano de Fiscalización Superior (ORFIS) registró más de 2 mil 372 millones en observaciones globales, que incluyen dependencias estatales y municipios.

De ese abismo financiero, la Secretaría de Salud emerge como el principal foco de sospecha. Ahí deberán comparecer exfuncionarios para explicar las inconsistencias detectadas, aunque la historia reciente demuestra que en Veracruz la “aplicación de la ley” rara vez toca a los cercanos al poder.

El discurso de Bautista Hernández, que jura no solapar a nadie, contrasta con los hechos: el Congreso avaló una cuenta plagada de observaciones bajo el argumento de “esperar el plazo legal” para solventarlas. En la práctica, significa dar oxígeno político a una administración con claros signos de desvío y opacidad.

Mientras tanto, los veracruzanos siguen pagando los platos rotos de un gobierno que se dice honesto pero que, año tras año, arrastra millones perdidos en gastos sin justificar, obras inconclusas y un sistema de salud colapsado.

La aprobación “con reservas” no es un acto de transparencia, sino una concesión pactada. Un mensaje claro: en Veracruz, la justicia fiscal sigue siendo selectiva, y los millones extraviados aún tienen padrino político.

Redacción Reportaje Veracruzano

Publicaciones relacionadas

Botón volver arriba