Delfines en peligro: otro ejemplar muerto en playas de Coatzacoalcos evidencia la crisis ambiental en Veracruz

Coatzacoalcos, Ver. – La tragedia ambiental continúa en las costas veracruzanas. Este jueves, un delfín nariz de botella fue hallado sin vida en la playa de Coatzacoalcos, a la altura de la avenida Las Palmas, en la colonia El Paraíso. La escena no solo refleja la vulnerabilidad de estas especies, sino también el impacto devastador de las actividades humanas en los ecosistemas marinos.
El ejemplar, un macho de aproximadamente 2.40 metros de longitud, presentaba una mutilación en la aleta caudal, un indicio alarmante de que pudo haber quedado atrapado en redes de pesca y que, para evitar daños en el equipo, los responsables optaron por cortarla, según explicó el médico veterinario Jaime Takami Ortega.
Un año fatal para los delfines en Veracruz
La muerte de este delfín no es un caso aislado. En lo que va del año, al menos tres ejemplares han sido encontrados sin vida en el sur del estado, incluyendo uno en la playa Las Palmitas, en Agua Dulce. Este patrón de decesos evidencia una crisis ecológica que no puede seguir siendo ignorada.
«Otro delfín y no paramos, ha sido el año más trágico para estos mamíferos marinos que son tan hermosos», lamentó Takami Ortega, reflejando la preocupación de la comunidad ambientalista.
Redes de pesca, contaminación y negligencia humana
Aunque la amputación sufrida en vida podría haber sido la causa de la muerte de este ejemplar, la situación apunta a un problema más profundo. Para esclarecer las causas exactas, se realizará una necropsia rápida para determinar la presencia de hidrocarburos, basura o microplásticos en su estómago.
La contaminación de los océanos y la actividad pesquera irresponsable están cobrando la vida de especies marinas a un ritmo alarmante. La presencia de plásticos y desechos tóxicos en el agua pone en riesgo no solo a los delfines, sino a todo el ecosistema marino.
¿Hasta cuándo ignoraremos la crisis ambiental?
El hallazgo de este delfín es una señal de alerta que no puede ser desestimada. Veracruz, con su vasta biodiversidad marina, necesita urgentemente estrategias de conservación y regulación más estricta en la actividad pesquera. Si no se toman medidas inmediatas, la mortandad de estos animales seguirá en ascenso, llevando al ecosistema a un punto de no retorno.
Las autoridades ambientales, pescadores y la sociedad en general tienen la responsabilidad de cambiar el rumbo. De lo contrario, estas playas, que alguna vez fueron hogar de vida, se convertirán en un cementerio marino silencioso.
Redacción Reportaje Veracruzano