
Xalapa, Ver.— En un gesto que busca ir más allá de lo protocolario, el Poder Judicial del Estado de Veracruz realizó la octava edición del “Bazar Naranja, Mujeres Emprendedoras”, un espacio concebido para visibilizar proyectos liderados por mujeres y fortalecer su autonomía económica como herramienta contra la violencia de género.
El evento, organizado por el Órgano de Administración Judicial y la Unidad de Género, reunió a magistradas, magistrados, personal jurisdiccional y visitantes en torno a un mismo propósito: reconocer que el emprendimiento femenino no solo transforma economías locales, sino que también reconfigura vidas y rompe círculos de violencia.
Entre las asistentes destacó la presencia de la magistrada Rosalba Hernández Hernández, presidenta del Tribunal Superior de Justicia; la magistrada Paulina Elizabeth Ahumada Santana, presidenta del Tribunal de Disciplina Judicial; la magistrada Luz María López Aburto, presidenta del Tribunal de Conciliación y Arbitraje, y el Mtro. Antonio Sobrevilla Castillo, integrante del Órgano de Administración Judicial, quienes coincidieron en que la justicia también se construye con igualdad de oportunidades.
De la inspiración al crecimiento colectivo
En su intervención, la Mtra. Alma Rosa Flores Ceballos, presidenta del Órgano de Administración Judicial, recordó que detrás de cada stand existe una historia de lucha y perseverancia. “Cada proyecto presentado representa no solo un medio de vida, sino también un sueño hecho realidad, una historia de inspiración y un ejemplo del valor incalculable de la perseverancia”, afirmó.
Además, anunció que a partir de octubre, el Bazar Naranja ampliará su red de apoyo, pasando de 67 a 200 mujeres emprendedoras en las regiones norte, centro y sur del estado. El objetivo es que ningún talento quede en la sombra ni ningún esfuerzo sin respaldo.
La voz de las emprendedoras
En representación de las participantes, la señora Catalina Barona Morales agradeció el espacio que —dijo— no solo les permite generar ingresos, sino también dotar de un rostro humano a proyectos que antes parecían invisibles. “Es una oportunidad para crecer, para fortalecer la economía de nuestras familias y para darle valor a lo que hacemos”, expresó.
Mucho más que un bazar
Aunque presentado bajo el marco del Día Naranja, la iniciativa trasciende la conmemoración: se ha convertido en una plataforma de encuentro y sororidad, donde las mujeres emprendedoras muestran no solo productos, sino también su capacidad de resiliencia y creatividad.
El “Bazar Naranja” del Poder Judicial de Veracruz demuestra que la justicia no solo se imparte en tribunales: también se ejerce creando condiciones de equidad y reconociendo que la autonomía económica es un pilar en la erradicación de la violencia de género.
Redacción Reportaje Veracruzano