Coatzacoalcos: desmantelan taller convertido en deshuesadero clandestino con vehículos robados

Coatzacoalcos, Ver. – La delincuencia organizada encontró en los talleres mecánicos de Coatzacoalcos un nuevo disfraz. La mañana de este jueves 2 de octubre, un impresionante operativo conjunto de fuerzas estatales y federales sacó a la luz lo que parecía un simple taller en la colonia Cuauhtémoc, pero que en realidad operaba como un deshuesadero de vehículos robados.
En el lugar, ubicado sobre la calle Reyes Azteca, las autoridades localizaron al menos 20 motocicletas y dos automóviles con reporte de robo, evidenciando que las instalaciones no eran un negocio común, sino una fachada para la desarticulación y venta ilegal de piezas, e incluso, de acuerdo con las indagatorias, para la reutilización de unidades en actividades delictivas.
El despliegue incluyó a agentes ministeriales, policías estatales, efectivos del Ejército Mexicano y elementos de la Guardia Nacional, lo que paralizó a varias cuadras de la zona y dejó atónitos a los vecinos, quienes observaron cómo el inmueble era intervenido tras ser identificado como un centro de operaciones ilícitas.
A pesar del hallazgo de las unidades, no se ha confirmado la detención de responsables ni se ha difundido un balance completo de las diligencias, lo que genera suspicacias sobre la profundidad de la investigación y la posible existencia de una red de complicidades que va más allá de un solo taller.
El caso no es aislado. Apenas en julio pasado, en la colonia Tierra y Libertad, un motociclista reconoció su unidad robada dentro de otro taller mecánico, lo que desató un operativo similar. Estos patrones, cada vez más frecuentes, ponen en entredicho la capacidad de las autoridades locales para frenar un fenómeno que ha convertido a Coatzacoalcos en terreno fértil para la industria del robo y desmantelamiento de vehículos.
La ciudadanía se pregunta: ¿quién protege estos negocios ilegales?, ¿hasta dónde llega la cadena de complicidad? Mientras tanto, la recuperación de las motocicletas y automóviles representa solo la punta del iceberg de un problema que sigue creciendo en las entrañas del puerto.
Redacción Reportaje Veracruzano